enlatarte

Texto y fotografías por: REBECA BLÁZQUEZ

¡Hola, hola! Tú, sí, ¡tú! Estudiante en Barcelona, ciudadano de la provincia, de la región o del país. Sí, ¡tú! Tú que no es la primera vez que visitas Barcelona y estás harto de escuchar y ver los típicos y tópicos de la gran ciudad condal. ¿Te apetece darte una vuelta por el Raval? Sí, sé que no has escuchado hablar muy bien sobre él. Pero ven con nosotros y descubrirás una Barcelona llena de vida y de puro arte. Y no, no es una mini guía al uso clásica. No te diremos que vayas a la Sagrada Familia, al Parque Güell o La Pedrera. No, a la Rambla tampoco, aunque pasaremos cerca de ella.

Cuando nos hablan del Raval lo primero que se nos viene a la cabeza no es precisamente una imagen muy buena, ¿verdad? Todos (o la gran mayoría de nosotros) hemos escuchado y/o hemos sido aconsejados durante muchos años en evitar esa zona e, inconscientemente, hemos creado una imagen preconcebida que no hace justicia a lo que el polémico barrio del Raval es hoy en día: el barrio con más personalidad de Barcelona. Si bien es cierto que aún sigue sin ser el barrio más limpio y seguro que nos podemos encontrar en la ciudad condal, sí es el más alternativo y peculiar.

A tan solo unos pasos del Barrio Gótico y el Eixample, su acceso principal se encuentra a través de la famosa calle de La Rambla. Una vez dentro, el cambio es notable: estrechas calles, grandes plazas y un ambiente multicultural como no lo hay en ningún otro lugar. Aquí encontraremos una amplia variedad de restaurantes, bares, cafeterías y tiendas vintage que no nos dejarán indiferentes.

Así pues, a tan solo diez minutos andado del barrio del Eixample yace el barrio de El Raval, indiferente a la gran ciudad y a las grandes marcas y edificios de lujo que encontramos en la ciudad. Y es que, nacido fuera de las murallas, a través de campos y caminos rurales, aún podemos encontrar en sus calles la señalización medieval para el transporte de la época: los caballos.

El Raval es auténtico por sus edificios históricos y sus calles llenas de vida no sólo por sus habitantes, sino también por el arte callejero. No es de extrañar, pues, que la anónima pareja de me_lata lo haya escogido para decorar sus calles con gran parte de su obra.

"No tienes remedio", "Stay True", Fer-te feliç" – Carrer dels Tallers

La calle Tallers no es solo conocida por su ambiente juvenil y su gran atractivo medieval. Conectando La Rambla con Universitat, en sus 200 metros de calle, podemos encontrar las tiendas con más variedad de todo el Raval: desde tiendas góticas, pasando por tiendas vintage, de prendas handmade, ideales para skaters i surfers, hasta una amplia variedad de establecimientos musicales con sus respectivos merchandaising. Una sola calle que sin duda concentra una gran variedad de estilos y en la que todo el mundo encontrará su lugar.

"Corazón Poeta" y "Dream Big" – Carrer de Valldonzella

Además, casi al final de la calle Tallers, encontramos una enorme plaza en la que (a su lado izquierdo, concretamente al principio de la calle Valldonzella) se encuentra la tienda de ropa vintage Holala Plaza. ¿Qué por qué os estamos dirigiendo a esta tienda? Os preguntareis... Pues bien, resulta que los artistas anónimos me_lata tienen expuesto en una de sus paredes una gran cantidad de latas con mensajes. Sí, bien conservadas y sin que ninguna persona maleducada las haya distorsionado o arrancado con el tiempo. Así pues, es el lugar perfecto para ver el arte de esta pareja en todo su esplendor.

"Nobody else can do it like you do" y "Tu ets amor" – Carrer de Joaquin Costa

Esta calle nos llevará derechitos a otro punto de interés que no nos dejará indiferentes, el Museo de Arte Contemporáneo. Pero antes, paseemos por esta interesante calle donde continuando con la dinámica y esencia del barrio del Raval nos encontraremos comercios de todas las culturas, arte callejero por todos lados y gente muy divertida y alegre que no dudaran en sacarte una sonrisa mientras estas concentrado intentando retratar algo con tu cámara.

"El lado bueno de..." - Plaça dels Àngels y "Unstoppable" - Plaça de les Caramelles

Si bien sabemos que el barrio del Raval es el lugar dónde se acoge a los niños y adolescentes más inquietos de Barcelona, y es que los encontraremos principalmente en la Plaza dels Àngels dando tumbos y saltos sin cesar con sus monopatines. Sí, ¡esa es! La misma que estáis pensando, la popularmente conocida plaza de los skaters, la cual da como bienvenida al imponente Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA). Pero, además, no solemos conocer que también alberga muchas galerías y estudios de arte así como librerías modernas para todo tipo de públicos.

Si bajamos por la calle dels Àngels justo al lado de la Plaça de les Caramelles (en la que encontraremos a niños golpeando pelotas como si no hubiera mañana, indiferentes a lo que ocurre y hay a su alrededor), llegaremos hasta el Convento de los Ángeles, otro de los espacios del MACBA en el cual se realizan exposiciones y se conserva del edificio original tres grandes salas con bóvedas. En la capilla además se encuentra uno de los soportales del renacimiento más importante de Barcelona.

"Creer es poder" - Plaça d'Emili Vendrell

¿Paramos para descansar y tomar algo? Si seguimos por la calle Peu de la Creu nos volveremos a encontrar la Calle de Joaquin Costa, sí, la misma que nos traslada a un arte incesante. Pues bien, justo en el punto que conecta las dos calles nos encontramos la plaza d'Emili Vendrell. Por si no habíamos tenido suficiente con el arte callejero, aquí nos podemos recrear un buen rato con la cámara o simplemente sentarnos en alguna de sus terrazas y disfrutar del arte.

"Barnaloca" y "A tu lado siempre" - Carrer del Carme

Pasaremos por la calle del Carme, una de las calles principales del Raval, la cual la cruza en horizontal y desde él que podemos adentrarnos en muchas otras calles donde tendremos la oportunidad de ver y seguir cazando más latas con mensajes, como son Carrer de l'Hospital, Carrer d'En Roig, Carrer d'Agustí Duran i Sanpere, Carrer del Dr. Dou, Carrer de la Riera Alta y/o Carrer de la Riera Baixa, entre otros.

Nina quan et vaig coneixer canvià (tot) - Carrer de la Riera Baixa

Cuando hablamos del estilo de vida vintage, sin duda estamos hablando de la colorida y divertida calle de la Riera Baixa. Ésta sigue "atrapada" en los años '60, '70 y '80 gracias a sus tiendas de ropa y accesorios de segunda mano.

Plaça del Pedró

Continuamos por Carrer del Carme dirigiéndonos hasta Carrer de la Cera. De camino nos encontraremos con la plaza del Pedró, conocida por ser la plaza que alberga la fuente de Santa Eulalia, patrona de la ciudad. Una plaza más del Raval, llena de vida. No es de extrañar ver a la gente de mayor edad asomada en su balcón, desde el confort de sus casas, viendo el movimiento, las horas y la vida pasar bajo sus pies. Y es que si Picasso se inspiró en los habitantes de este barrio durante el periodo azul de su obra, ¿cómo van a dejar ellos de observar su día a día y aprender a comprender esta nueva vida desde sus balcones? Así que ya sabéis, deteneros y observar, aprenderéis u os inspiraréis de algo seguro, nunca que se observa se hace en vano.

"El Raval" - Carrer de la Cera

¡Y es que no podrían haber colocado estas latas en mejor lugar! Nos encontramos en la esencia del Raval por ser una de las calles más históricas del barrio y, nada más y nada menos que el lugar donde nació la famosa Rumba Catalana. Gracias a la gran comunidad de etnia gitana que convivió en esta calle durante mucho tiempo, podemos disfrutar de una pieza de arte una vez más. El nombre de la calle viene dado por los grandes ríos de cera que se formaban a causa de las numerosas velas que esta comunidad colocaban ante la virgen para protegerse de la peste.

"Don't worry" - Rambla del Raval

¿Qué mejor filosofía que la de Bob Marley para tomar en esta avenida? Olvida tus preocupaciones y ven a tomar un té con menta acompañado de pastelitos en cualquiera de las terrazas de la Rambla. Disfruta de la sinfonía que crea el murmullo de la gente en las terrazas y el canto de los pájaros posados en los árboles y aprovecha para hacerte fotos con el gato más grande y gordo que hayas visto jamás, una obra del artista colombiano Botero.

"Eres tú mi artista favorita no tienes rival" – Carrer de la Riereta

En la calle paralela de la Rambla del Raval, encontramos la calle de la Riereta en la que, al final de ésta, se encuentra el lugar más tranquilo del barrio: el Monasterio de Sant Pau del Camp. El pequeño y apartado monasterio benedictino es una de las iglesias más antiguas de la ciudad condal. Junto a él, un precioso jardín que hará que no evadamos del bullicio del barrio y de la ciudad.

"No puedo vivir sin ti" – Plaça de Sant Agustí

En la otra dirección, siguiendo de nuevo la calle Sant Pau y encontrándonos con la calle de l'Arc de Sant Agustí se encuentra asentada la Parroquia de Sant Agustí. Conocida popularmente como la Catedral de los Pobres, es otro de los atractivos del barrio del Raval. La plaza por la cual se accede es uno de los claustros que antiguamente albergaba la iglesia. Actualmente poco queda de él, aunque la podemos disfrutar de otras maneras. Los fines de semana, por ejemplo, tiene lugar en ella un mercado de artesanos.

"Pasarán más de mil años muchos +" – Plaça de Sant Galdric

A través del Carrer de l'Hospital, cazando un par de latas más, nos dirigiremos hacía el Mercado de la Boqueria. Este mercado delimita el Raval, junto a la Rambla y el barrio de Sant Antoni. Más allá de sus sabores, su masificación, sus colores y sus alegres tenderos, si nos damos una vuelta por las plazas y calles que rodean la Boqueria encontraremos alguna que otra lata más así como continuará presente la esencia del barrio. Porque como dice el mensaje de la Plaza de Sant Galdric, pasarán más de mil años... Muchos más... Pero el Raval mantendrá siempre su esencia, su espíritu y su alegría.

Esto es solo un pequeño recorrido por este humilde barrio, nada comparable a los mil y uno mensajes que se encuentran repartidos no sólo por El Raval, sino por toda Barcelona. Si estás interesado en recorrer sus calles e ir cazando latas, te lo ponemos fácil. No dudes en leer el código QR e ir coleccionando mensajes enlatados. Pero ¡atento! La anónima pareja sigue haciendo de las suyas y cuando menos lo esperamos, aparecen nuevas frases enlatadas en los lugares más inhóspitos.